El CBD y el THC son los componentes más famosos del cannabis. A grandes rasgos, el THC es el ingrediente psicoactivo; y el CBD es ese principio activo que lo está poniendo de moda entre todos los públicos, y al que se le adjudican todos los beneficios del cannabis medicinal.
¿Qué es el CBD?
El nombre completo del CBD es cannabidiol. Este cannabinoide es uno de los componentes del cannabis más famosos ahora mismo. Es el principio activo que ha revolucionado la percepción de la marihuana a nivel mundial por sus propiedades terapéuticas. Lo más importante es que este cannabinoide no despierta efectos psicoactivos. Es decir: no altera nuestras capacidades cerebrales. Y además es capaz de contrarrestar los efectos psicoactivos del THC.
¿Qué es el THC?
El nombre completo del THC es 9 Delta-Tetrahidrocannabinol y aunque a día de hoy el CBD parezca estar eclipsando su fama, el THC es la gran estrella del cannabis. Es ese cannabinoide responsable del “colocón” de la marihuana, y ese principio activo por el que el cannabis ha sido considerado sustancia prohibida en tantos países.
¿Que los distingue ?
Ambos cannabinoides despiertan reacciones en el cuerpo humano gracias al sistema endocannabinoide, pero los efectos que producen son diferentes. Mientras que el THC afecta a partes de nuestro cerebro, el CBD no altera nuestras capacidades mentales en ningún caso. Esa es la principal diferencia entre cómo afectan ambos cannabinoides a nuestro cuerpo: si consumimos CBD nuestra cabeza sigue funcionando igual, si consumimos THC, no.
Los efectos del CBD, a grandes rasgos, son la relajación muscular, la disminución de convulsiones o la reducción de la ansiedad, entre otros. Al THC, en cambio, se le atribuyen efectos psicoactivos, y también propiedades narcóticas, relajantes y antiinflamatorias.
A diferencia del THC, el CBD n no intoxica y no es una droga, se considera seguro y no tiene efectos secundarios conocidos.